“Losers” significa “perdedores” en inglés y esta palabra nos explica la vida de Manuel y Sandra, dos personas que ya han llegado a la década de los cuarenta y que no han conseguido nada de todo lo que se supone que tienes que tener en esta etapa: niños, matrimonio, dinero, etcétera.
Los dos personajes se conocerán cuando Sandra acuda a la tienda para dar de baja una línea telefónica y, a partir de aquí, el romanticismo está servido.
“Losers” nos relata de una forma sarcástica repleta de buen humor la situación en la que muchas personas se pueden encontrar en algún momento de sus vidas por culpa de la presión social. Estar soltero a los veinte está bien visto pero a los cuarenta es sinónimo de que hay algo en ti que no funciona del todo bien. Si estás solo es por culpa tuya y todo tu entorno sentirá un poco de lástima: tus amigos, tus familiares, tus compañeros de trabajo… Esa presión es la que hace que personas como Sandra o Manuel se sientan con la obligación de juntarse con alguien y demostrar, así, que son personas normales y corrientes.