El texto habla del camino del amor, desde el flirteo del inicio, pasando por el sexual que se desarrolla en amor transcendental, hasta el final que siempre tiene, lo más tarde, con la muerte. En escena se presenta entonces el amor en todas sus facetas: el amor de juventud, el amor que nos da sentido y el amor que nos lo quita, el amor que devuelve la esperanza, el amor que nos devasta.
En este proyecto escénico se encuentran la danza contemporánea, la música, tanto clásica como actual, y la palabra tomada de textos líricos que vienen desde la Edad Media (Francisco Bocanegra o Gutierre de Cetina) hasta mediados del s. XX (Rafael Alberti, García Lorca o Pablo Neruda), pasando por nuestro Siglo de Oro (Quevedo, Teresa de Jesús o Juana Inés de la Cruz).