Una producción de Melpómene Teatro.
Nos hemos liberado de todos los condicionantes y hemos decidido jugar. Porque el teatro, no es más que juego.
Lisandro y Hermia han sido más que amigos desde pequeños. Pero Hermia, en pleno cambio, como el Madrid de los años 80, se ha cansado y está decidida a dejarle. Y es entonces cuando aparece Demetrio, una especie de Miguel Bosé venido a menos. Pero Lisandro no se va a dar por vencido y va a hacer todo lo que pueda por recuperarla, sobretodo cuando se entera de los planes de la pareja para fugarse de Madrid. Lo que Lisandro no sabe es que mientras él lucha por Hermia quien de verdad está loca por él es Elena. En medio de tan curiosos enredos sentimentales, las ondinas, duendes y demás, se encuentran en plena lucha por el poder entre Oberón y Titania, reyes de todas las criaturas del mundo mágico, que no contentos con sus propias disputas deciden interceder en las de los humanos, enredando aún más las historias. Y para completar este cuadro, un curioso grupo de drag-queens, con una performance a medio hacer, acaba en el barrio de Malasaña donde transcurre nuestra historia y se ven involucrado en tales enredos.