“Bodas de Sangre” refleja con todo su caudal poético, musical y trágico el tema del amor perdido, del amor que pudo ser y no fue, que aparece en toda la obra lorquiana y que esconde la propia experiencia del autor. Lorca diría en 1933 “aprender a vivir estriba en respetar los propios instintos” frase que hace decir a los leñadores en el acto tercero. Con sus coros, sus canciones de boda, sus personajes míticos, sus tradiciones y folclore “Bodas de Sangre” es la tragedia pura, donde la fuerza de la naturaleza, la maldición del tiempo y el error trágico cumplen su papel esencial.