Homero Teatro no hace un teatro social de integración, nosotros trabajamos por y para la NORMALIZACIÓN. Nuestros actores son personas normales y corrientes, mayores en su mayoría sin formación teatral ni académica. Su aportación a las artes escénicas radica en la ilusión, el esfuerzo diario, el no tener que demostrar nada a nadie excepto a ellos mismos, la capacidad de superación, la forma de “ver” desde dentro, la autonomía, el humor.