Gonzalo Gústios, Señor de Salas, casado con Dña. Sancha, tuvo siete hijos: los infantes de Lara. En la celebración de las bodas entre Rodrigo Velázquez, hermano de Dña. Sancha, y Dña. Lambra, se enfrentaron los familiares de la novia con los infantes de Lara. Durante ese enfrentamiento murió un primo de doña Lambra a manos de Gonzalo González, el menor de los Siete Infantes de Lara.
Este y otros sucesos provocaron la sed de venganza de Dña. Lambra, y convence a su marido, D. Rodrigo Velázquez, quien urdió un plan por el que Gonzalo Gústios fue enviado a Córdoba para entregarle una carta escrita en árabe a Almanzor, I Ministro del Califa, en la que se rogaba a este que el portador fuese asesinado. Sin embargo, Almanzor se apiadó de él y se limitó a retenerlo en prisión.
A su vez, los siete hermanos de Lara habían sido dirigidos hacia una emboscada ante tropas musulmanas. Nuño Salido, su tutor, se enteró de la felonía de Rodrigo Velázquez e intentó avisar a los Infantes, pero finalmente fue asesinado junto a ellos.
En la batalla del Vacar los Siete Infantes fueron decapitados y sus cabezas remitidas a Córdoba. Según la leyenda, fueron colgadas en la calleja de los 7 arquillos.
Durante su cautiverio, Gústios fue atendido por Fátima, una hermana de Almanzor, que dio a luz a un hijo llamado Mudarra. Él será el que, con el paso del tiempo y una vez conocida su verdadera historia, vengará la muerte de sus hermanos, matando a su tío Rodrigo Velázquez y quemando el palacio de doña Lambra