El juego a vida o muerte de vivir. Eso es Effetá, el combate crucial entre el bien y el pecado. El campo de batalla: el Hombre. Vivir se convertirá en una apasionante lucha en que el mal jugará todas sus cartas para ganarse al Hombre, esto es, perderlo. Durante su existencia se cruzará con personajes alegóricos como Abel, Jacob, la Desesperanza, etc., que lo obligarán siempre a una elección, acertada o no. Fuerzas contrapuestas tirarán continuamente de su voluntad y bien lo ensalzarán a la felicidad más gloriosa o bien lo arrastrarán al fondo amargo de la perversión. En Effetá asistiremos a una renovación de la vieja y españolísima tradición del auto sacramental, pero rejuvenecido con un lenguaje de hoy, personajes de hoy y asuntos tan de hoy como el adictivo mundo de los videojuegos o la alta cocina y sus extravagancias. ¿De quién será la victoria? ¿De la luz o las tinieblas? ¿Qué le espera al Hombre? ¿Qué te espera a ti? Esa es la lid de Effetá. Oponentes: Dios y el diablo. Duración de la contienda: tu vida.